En verano, debido a las altas temperaturas, aumentan las intoxicaciones alimentarias. Esto se debe porque se dan las condiciones perfectas para que los alimentos desarrollen microorganismos. Por tanto, la intoxicación alimentaria se producirá por la ingesta de alimentos o agua que contiene microorganismos patógenos o toxinas producidas por los mismo.
Aunque en la mayoría de los casos las intoxicaciones alimentarias suelen ser leves y los síntomas desaparecen a los pocos días, es cierto que nunca se le debe restar importancia. Esto se debe porque algunas pueden ser graves e incluso mortales. Por tanto, lo mejor es acudir al médico cuando se sufra una intoxicación alimentaria. De esta manera, valorarán tu situación para ponerte el tratamiento más adecuado.
Entre los síntomas más comunes, podemos destacar: diarrea, vómitos, náuseas, dolor estomacal, cansancio, pérdida de apetito e incluso fiebre.
¿Cómo podemos prevenir las intoxicaciones alimentarias en verano? Ante todo, se debe realizar una buena manipulación y conservación de los alimentos tanto dentro como fuera de casa. Por supuesto, la higiene juega un papel fundamental. A esto tenemos que sumar una serie de recomendaciones.
Apunta los consejos que te damos desde Farmacia Paco y Clara para prevenir las intoxicaciones alimentarias este verano.
Consejos para la prevención de las intoxicaciones alimentarias
- Fecha de caducidad. Revisar en todo momento la fecha de caducidad o consumo preferente. Si está fuera de fecha, no comerlo.
- Agua potable. Tanto para cocinar como para beber, deberás usar agua potable apta para el consumo. En caso de viajar al extranjero en verano, recuerda usar agua embotellada para todo en aquellos países donde el agua no sea potable. Cuando decimos usar agua embotellada para todo significa para beber, lavarse los dientes lavar la fruta, cocinar…
- Cocinar los alimentos. Asegúrate que el interior del producto está bien cocinado (debe llegar, al menos, a los 70ºC. También debe llevar a esa temperatura la comida recalentada.
- ¡Alimentos crudos o mal cocinados! No ingerir alimentos crudos o mal cocinados, en especial carnes, pescados, mariscos y huevos.
- Conservación de los alimentos. No dejar los alimentos a la temperatura ambiente ya que con las altas temperaturas se corre el riesgo de la proliferación de microorganismos. Por tanto, sacar solo la comida que vaya a ser inmediatamente consumida. Si no es así, mejor meterla en la nevera.
- Descongelación. Para una correcta descongelación, recuerda que se debe realizar en el frigorífico. Nunca a temperatura ambiente. ¿Por qué? Porque si descongelamos fuera de la nevera favorece la multiplicación de microorganismos. Además, debes usar un recipiente con tapa y rejilla para que el líquido se mantenga separado del alimento.
- Limpieza y desinfección de vegetales crudos. También se debe limpiar correctamente la fruta antes de consumirla.
Además, será fundamental la correcta higiene en la cocina. Esto significa que todos los utensilios para cocinar deben estar limpios. Además, hay que lavarse las manos a la hora de manipular los alimentos, pero también habrá que hacerlo antes de comer ya que son una vía de trasmisión de bacterias, gérmenes y virus.