¿Los excesos veraniegos han pasado factura a tu colesterol? En verano es habitual descuidar la dieta. Pasamos más tiempo fuera de casa, lo que significa que terminaremos comiendo en bares, chiringuitos de la playa o en casa de amigos. Por supuesto, aumentaremos el consumo de alimentos que normalmente no solemos comer como ocurre con los helados. Tampoco nos podemos olvidar de las clásicas barbacoas, típicas durante la época estival.
No solo descuidamos nuestra alimentación, sino que, además, dejamos de lado el deporte. Estos excesos provocarán un aumento del peso (se calcula que entre dos y cinco kilos extra), pero también un aumento del colesterol debido al abuso de grasas. Por eso, tras la vuelta a la normalidad, es importante hacerse un chequeo médico para saber cómo tienes el colesterol. Otra opción más rápida es acudir a tu farmacia de confianza para que te hagan la prueba del colesterol.
Es importante mantener el colesterol a raya y, para ello, es fundamental las revisiones, sobre todo para quienes son propensos a tenerlo alto o para aquellas personas que llevan mucho tiempo sin hacerse una analítica.
¡No te la juegues! El colesterol alto es un factor de riesgo ya que aumenta las probabilidades de sufrir una enfermedad cardiovascular. De hecho, se puede sufrir un infarto si no se toman las medidas adecuadas para bajar los niveles de colesterol en caso de tenerlo alto. Recuerda que el colesterol no avisa. No existen señales ni síntomas previos. Solo se puede saber si está controlado a través de unos análisis rutinarios.
Desde Farmacia Paco y Clara te dejamos unos consejos para regular y controlar el colesterol tras el verano.
Consejos para mantener a raya el colesterol tras el verano
Uno de los pilares fundamentales será cuidar la alimentación. Apuesta por una dieta equilibrada y variada con la vuelta a la rutina. Aumenta el consumo de verduras y hortalizas (se recomienda dos raciones al día, una en la comida y otra en la cena) y tomar entre dos y tres piezas de fruta al día. Los alimentos ricos en fibra son importantes tanto para el sistema digestivo como para el colesterol.
Otros alimentos que no deben faltar en tu dieta son: legumbres, cereales integrales, frutos secos, pescado, sobre todo el pescado azul, carne magra y lácteos desnatados, entre otros. También se recomienda cocinar con aceite de oliva. Por el contrario, se debe eliminar el consumo de alimentos ricos en grasas y azúcar como la bollería industrial, la cocida precocinada, las frituras, los refrescos, el embutido…
Cocina los alimentos al horno, a la plancha, asados, al vapor o a la parrilla. Estos métodos de cocinado son ideales para cocinar alimentos con poca grasa.
Junto a la alimentación, deberás organizarte para sacar tiempo para hacer deporte. El ejercicio es un gran aliado para luchar contra el colesterol, sobre todo si se sufre sobrepeso. Caminar todos los días 30 o 40 minutos será suficiente para iniciarse en el mundo del ejercicio. Poco a poco podrás ir aumentando la distancia, el tiempo y la intensidad a medida que se va ganando fondo.
La dieta y el ejercicio te ayudarán a regular y controlar el colesterol tras el verano. Asimismo, en la farmacia podrás encontrar una serie de complementos alimenticios que tienen por objetivo mantener a raya el colesterol. Para más información sobre estos productos, consúltanos.